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Cuando la tecnología falla... ¿qué nos queda?

Donde el caos tecnológico encuentra su equilibrio. Número #026.

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¿Listo para cuestionarte todo?

📅 Esta semana:

En El Chip Maestro, revivimos el gran apagón en España y Portugal y la incómoda verdad: sin tecnología, no somos nadie, ¿o sí? Y en La Butaca del Caos, El colapso nos recuerda que basta con que falle el Wi-Fi para que todo se venga abajo.

Pero antes, repasemos las noticias más relevantes de la semana…

📰 FLASH NEWS

⚡ Apagón en España y Portugal

El lunes 28, un apagón simultáneo dejó sin electricidad a millones de personas… y sin cobertura ni internet. Las baterías de respaldo duraron poco y las redes móviles se hundieron en horas.

La caída expuso la fragilidad del sistema: sin energía, ni llamadas, ni WhatsApp. ¿De qué sirve tanta digitalización si lo básico falla a la primera?

🦾 Duolingo se pasa a la IA y despide talento humano (y presume de ello)

La app de idiomas sustituirá parte de sus creadores por IA generativa. Su CEO lo anunció sin rodeos: serán una empresa AI-first.

Crear contenido ya no necesita personas: ahora se hace a escala, sin sueldos ni pausas. Si una IA lo hace “suficientemente bien”, ¿para qué molestarse en ser brillante?

🚀 Amazon lanza Nova Premier: su IA más potente hasta la fecha

Procesa texto, imágenes y vídeo, y brilla en tareas complejas que exigen contexto profundo, planificación y destilación de modelos.

Amazon lo presenta como su modelo “más capaz”. ¿El objetivo? Que sea tan bueno enseñando a otras IAs como ejecutando. ¿Estamos ante un nuevo maestro digital?

🖼️ Freepik lanza F Lite: IA legal y abierta

El nuevo modelo generativo de Freepik, F Lite, fue entrenado solo con imágenes con licencia y sin líos de copyright. Y sí, es open source y puedes usarlo en tu PC, sin conexión.

Tiene 10.000 millones de parámetros y ya está disponible en dos versiones: una más precisa y otra más creativa. ¿La diferencia? Esta vez no habrá juicio de por medio.

🤖 Meta lanza su app de IA: ahora sí va en serio

Meta AI, con 1.000 millones de usuarios al mes, ya tiene app propia para competir con ChatGPT. Funciona por texto o voz y recuerda tus gustos para responder con contexto.

Se integra con WhatsApp, Instagram y Facebook, pero también funciona sola. ¿El objetivo? Que tu nuevo mejor amigo digital… sea de Meta.

🙃 ChatGPT se volvió un pelotas (y OpenAI lo admite)

Tras una actualización fallida, el modelo GPT-4o empezó a aplaudir todo: desde ideas absurdas hasta peligrosas. OpenAI tuvo que dar marcha atrás.

El problema: respuestas demasiado serviciales y falsas, por culpa de feedback a corto plazo. Ahora prometen más honestidad, personalidades personalizables y menos peloteo. ¿Se viene el ChatGPT con carácter?

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🤖 EL CHIP MAESTRO

Tiempo de lectura: 2 minutos y 30 segundos

⚡ ¿Y si mañana se apaga todo?

Esta semana fue un apagón.

Mañana podría ser una caída global de servidores.

O un fallo eléctrico en cadena.

O un ciberataque masivo a infraestructuras críticas.

Y la pregunta no es si puede pasar.

Es que ya ha pasado.

📌 Esta semana, millones de personas en España se quedaron sin luz por un fallo técnico.

Semáforos fuera de servicio.

Cajeros bloqueados.

Trenes detenidos.

Teléfonos sin cobertura.

En cuestión de minutos, un país moderno… volvió al silencio.

Y descubrimos algo que, en el fondo, ya sabíamos:

Estamos ultra conectados. Y ultra expuestos.

Basta un cable desenchufado para recordarnos lo frágil que es todo.

🧠 Tecnología que nos da poder… pero también dependencia

Vivimos en un mundo donde todo depende de pantallas, redes, sensores y servidores.

Automatizado. Digitalizado. Gobernado por la IA.

Donde incluso lo básico (agua, luz, transporte, información…) ya no funciona sin una cadena invisible de sistemas.

Y cada día que pasa, dependemos aún más…

Pero sin electricidad… no hay nada.

📉 Los apagones ya no son cortes de luz.

Es una pausa en el sistema.

Una pausa que puede costarlo todo.

Y cuanto más avanzamos, más dependientes nos volvemos.

Más cómodos…

Y el mundo que estamos construyendo parece que se vuelve más frágil…

🤖 Cuando la IA sí salva el día

Sí, estamos hiperconectados y dependemos de la tecnología, eso es un hecho…

Lo que muchos no saben es que, en el mismo momento del apagón, hubo sistemas que sí aguantaron el golpe y lo mitigaron.

⚡ Algoritmos predictivos desviaron la sobrecarga eléctrica para evitar que la caída fuera mayor.

🏥 Hospitales con sistemas de IA priorizaron en segundos los suministros críticos.

🚆 Estaciones de tren redirigieron a los pasajeros gracias a sensores autónomos.

🧠 Bots empresariales mantuvieron operaciones básicas sin intervención humana.

En muchos casos, la IA y la tecnología moderna no evitaron el fallo… pero amortiguaron el golpe.

Empresas energéticas ya usan IA para gestionar redes complejas, detectar picos anómalos o anticipar ciberataques.

En varios países, los sistemas inteligentes son la diferencia entre un susto… y una catástrofe.

🏥 ¿Y si no tuviéramos nada?

Ahora imaginemos el escenario sin IA o automatización básica.

¿Qué habría pasado sin sistemas que actúan solos para redirigir servicios mínimos? ¿Sin alertas automáticas? ¿Sin backups inteligentes?

🛑 Bancos paralizados.

🛑 Hospitales colapsados.

🛑 Millones de datos perdidos.

🛑 Call centers de emergencia saturados.

🛑 Supermercados con cámaras y cajas bloqueadas.

La tecnología nos hace vulnerables, sí.

Pero también puede ser nuestra única y mejor defensa ahora mismo.

Cuando falla todo lo demás, la IA, bien diseñada, puede seguir funcionando, tomar decisiones rápidas, mantener lo esencial operativo.

Si todo eso hubiera dependido solo del factor humano… probablemente estaríamos hablando de consecuencias mayores.

Porque la tecnología no es infalible, pero sin ella, seríamos mucho más vulnerables.

🌍 ¿Demasiado conectados para vivir?

Estamos diseñando un mundo donde todo depende de todo.

Y cada dependencia añade una nueva vulnerabilidad.

La paradoja:

Cuanto más avanzamos, más frágiles parecemos.

¿La solución? No es apagarlo todo.

Es usarlo mejor.

La IA también puede ayudarnos a vivir con menos consumo y más resiliencia:

🌱 IA para optimizar el consumo energético.

🔍 IA para predecir fallos antes de que ocurran.

🔌 IA para crear sistemas independientes, capaces de funcionar sin red.

🧩 IA para diseñar estructuras resilientes, sin efecto dominó.

📦 Robots en almacenes siguen operando tareas críticas sin humanos.

📈 Plataformas de trading ejecutan cierres automáticos para evitar pérdidas masivas.

💡 Redes eléctricas se autorregulan para evitar apagones mayores.

El problema no es estar conectados.

La IA puede ser la causa del colapso…

…o la mejor aliada para evitarlo.

La pregunta incómoda es esta: ¿estamos preparados para vivir sin tecnología, aunque sea por unas horas? ¿O hemos delegado tanto que ya no tenemos plan B?

🧬 ¿Y si el futuro no es más tecnología, sino una mejor forma de usarla?

💬 ¿Qué opinas tú?

¿Estamos demasiado conectados como para sobrevivir al próximo apagón?

¿Puede la IA ser parte de la solución… o solo está haciendo la caída más alta?

Porque cuando todo falla… solo queda lo que hiciste antes de que fallara.

🍿 LA BUTACA DEL CAOS

El Colapso (2019)

¡Ah, el gran apagón de abril de 2025! Mientras medio país se quedaba atrapado entre semáforos muertos, móviles inútiles y neveras mudas, a alguien —seguro— le vino a la cabeza esa serie francesa de 2019: El colapso(L’Effondrement). Una ficción que, a juzgar por lo reciente, ya no parece tan “ficción”. Porque si algo dejó claro esta miniserie es que el fin del mundo no llega con explosiones… llega cuando falla el Wi-Fi.

⚠️ Sugerencia: mírala antes de que vuelva a irse la luz.

El colapso: Cuando todo se viene abajo... sin previo aviso

Creada por el colectivo Les ParasitesEl colapso es una miniserie de ocho episodios, cada uno grabado en plano secuencia y centrado en un punto de vista diferente del mismo desastre: un colapso social y energético sin explicación clara. Supermercados vacíos, gasolina que vale más que el oro, residencias de ancianos olvidadas, centrales nucleares sin control… No hay zombis, no hay asteroides. Solo la vida moderna dejando de funcionar.

Y ahí está su genialidad: no necesita inventarse nada. Basta con quitar el enchufe.

Técnica: Cámara sin cortes, nervios sin tregua

El uso del plano secuencia no es postureo artístico. Aquí funciona como una bomba de ansiedad. Te mete de lleno en el caos, en el desorden, en las decisiones que no puedes pausar ni repensar. Cada episodio es un escenario de presión creciente. No hay respiro. Ni para los personajes, ni para el espectador.

Y ojo, no hay estrellas. No hace falta. Los actores son lo bastante reales para que uno se pregunte: “¿Qué haría yo en su lugar?”. Y eso, querido lector, es exactamente lo que busca la serie. Incomodarte. Sin adornos.

¿Crítica social? Sí. Pero sin panfleto.

El colapso no sermonea. No dice “esto está mal” ni “miren qué malos somos con el planeta”. Solo plantea escenarios que, viendo lo ocurrido en Europa esta semana, no suenan tan extremos. No hay moraleja clara. Solo una verdad incómoda: nuestra civilización es más frágil de lo que creemos. Y nadie está realmente preparado.

Porque cuando la energía cae, también lo hacen las estructuras… y las máscaras.

¿Ficción o spoiler?

Resulta inquietante ver El colapso hoy. No por su contenido, sino por su parecido con lo que estamos viendo en tiempo real: sistemas interconectados colapsando por fallos mínimos, ciudades paralizadas en segundos, y personas enfrentadas a lo que nunca imaginaron tener que hacer.

El apagón de abril fue breve. Pero fue suficiente para recordarnos que el equilibrio moderno pende de un hilo. La serie, en ese sentido, no es tanto una distopía como un simulacro.

Conclusión: No hay que exagerar... pero tampoco dormirnos

El colapso es una serie sencilla, directa y eficaz. No busca epatar ni filosofar. Solo muestra lo que puede pasar. Y, si uno quiere, sirve como advertencia.

Porque si la luz se va y todo se viene abajo, no importan los discursos, las apps ni el trending topic. Importa cómo reaccionas. Y eso, amigo mío, no se ensaya.